26 Nov 2010

Huele a aire


Me gusta aislarme de la realidad. Sobretodo cuando hay personas discutiendo cerca de mí. Me gusta salir al balcón y sentir el aire fresco de una noche de otoño, mientras en la cocina, siguen discutiendo. Cierro los ojos  e intento hacer como que no lo escucho, como que no es verdad. Ahora es mi mundo, y mi mundo es como yo quiero que sea. Me encanta ese mundo en el que nada tiene que ver con la realidad, es en ese mundo donde me aíslo de la realidad, donde todo es posible, donde todo es un sueño. Es ese mundo en el que estás cuando ves una película, (en mi caso de ayer, El castillo ambulante)  y estás dentro del escenario. No te importa nada más que como va a seguir el argumento. Ahora estás aislada del mundo.  Por la noche, cuando estás dormida también te aíslas, porque, ¿quién piensa en exámenes cuando duerme? Pobre del que lo haga. Yo sueño con el negocio negro de cabras con plumas,  o que puedo volar por la calle de mi casa. Mis sueños forman parte de mi mundo. Los controlo cuando soy capaz y hago lo que me parezca mejor dentro de ellos.  Los sueños cuando estoy despierta… eso también es mi mundo. Dos de las hadas que hay en mi habitación, están vivas en mi mundo.
Los deseos también entran en ese mundo. Innumerables veces hemos pensado que esos sueños se hacían realidad, unos los cumplen, otros no llegan a cumplir sus deseos. Yo sí que lo hice, y no fue en mi mundo, fue en la realidad.
Algunos os preguntareis como es mi mundo… Eso es algo íntimo de cada uno xDDD
Otros estarán pensando en su propio mundo
Y yo hace unos segundos me acabo de asomar por la ventana y respirar el fresco aire de una noche de otoño. Me encanta como huele ese aire. Huele a… ai
re, sí.

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